Las redes 5G han sido un tema bastante discutido durante las últimas semanas, luego de que esta tecnología llegara a diferentes ciudades españolas y los usuarios fueran testigos de la capacidad ofrecida por esta nueva generación de conectividad de Internet. Ahora bien, ¿sustituirá el 5G a la fibra óptica? En las siguientes líneas haremos un análisis detallado al respecto.

Para todos los hogares, el acceso a fibra óptica significó un momento trascendental. Despedirse de la lenta conexión ADSL y comenzar a navegar en alta velocidad supuso una nueva era en lo referente a internet de uso residencial; una era que pareciera llegar a su fin con la irrupción de las redes 5G en dispositivos móviles y su plan de expansión hacia el internet residencial.

¿Qué es 5G?

Se refiere a las siglas utilizadas para definir a la quinta generación de tecnología relacionada con la telefonía móvil, la cual sucede a la 4G que actualmente se ha desplegado en prácticamente todo el planeta. Lo que ofrece esta nueva versión son velocidades de descarga que fácilmente pueden superar 1 Giga  con latencias inferiores a las presentadas por su antecesor.

Esta tecnología tuvo sus primeras versiones comerciales en 2019, pero será este 2020 cuando se extienda por completo y se vuelva el nuevo estándar en las telecomunicaciones.

5G, una alternativa más económica a la fibra óptica

Desplegar fibra óptica a nivel nacional es algo realmente costoso para los operadores. Se requiere miles de kilómetros de cable para hacer funcionar este servicio, lo que supone una inversión considerable de dinero y además, una autentica pesadilla logística; adicional a esto, los trabajos de urbanidad necesarios para introducir un cableado para el que no hay tuberías disponibles.

Por el contrario, incorporar tecnología 5G, que ofrecen velocidades de varios Gigas, solo requiere de un dispositivo receptor y el despliegue de transmisores en antenas que ya se encuentran distribuidas a lo largo y ancho de la nación. Las redes inalámbricas ciertamente resultan más eficientes además de ofrecer algunas ventajas estratégicas a nivel comercial, por su costo inferior.

Entonces, al hacer la comparación, la respuesta es clara: la balanza se inclina hacia la conveniencia del despliegue de las redes 5G en toda la nación. Este proceso ya ha comenzado, aunque no será del todo inmediato, puesto que hay otras variables que se deben considerar antes de decantarnos por la nueva generación de internet móvil.

La fibra óptica ofrece mayor nivel de estabilidad que las redes 5G

Sabemos que la tecnología 5G será el estándar dentro de unos años, tal como ocurrió con el 3G y posteriormente con el 4G. Sin embargo, en la actualidad se sigue desplegando fibra óptica por una razón bastante sencilla: la fibra óptica ofrece una mayor estabilidad en el servicio, con un nivel de latencia muy bajo, de hasta 1 ms, algo que por el momento no puede ser replicado por el 5G.

Ante este panorama, es bastante probable que por la novedad y la considerable diferencia de velocidad ofrecida a los usuarios, sean muchos los que se integren a esta tecnología, de la que aun no se tiene un desarrollo completo. Mientras termina de evolucionar por completo, se perfecciona, estabiliza y expande su alcance, puede que llegue a sustituir por completo a la fibra.

Los productos compatibles con redes 5G ya han comenzado a comercializarse, no solo en España sino en diferentes países. La expansión es vertiginosa, la aceptación enorme y las expectativas por el desarrollo de esta tecnología tienen al borde del asiento a millones de personas en todo el mundo, sobre todo a aquellos que utilizan el internet como herramienta de trabajo.